How much Nutella?

Rishikesh es la puerta de entrada al Himalaya. A pesar de situarse a poco mas de 400 metros sobre el nivel del mar, aqui ya se empieza a notar la grandeza de la inmensa cordillera que tengo a un centenar de kilometros. El atractivo de esta pequenya ciudad es el yoga, los puentes colgantes sobre el Ganges y, como no, los templos (el mas espectacular es el Shri Trayanbakshwar por sus 13 pisos y colorido) y las escalinatas situadas en sus orillas donde los indi@s se banyan y lavan la ropa.



















Llevo ya tres dias aqui y mi unica preocupacion ha sido la de ir a la clase de yoga de las 7:30. Por el momento, no lo he conseguido... pues el par de chiringos con buen que visitamos cada noche, donde los israelitas son la gran mayoria, tienen buena parte de culpa. Por suerte, hay otra clase a las 16:30 para tod@s aquell@s que no quieren o consiguen madrugar.

Ahora ya puedo decir que me he banyado en el agua del Ganges... aunque no lo hice en el mismo rio sino en uno de los muchos riachuelos con grandes cataratas que llegan a el.





Por el momento cada dia llueve y cuando lo hace es con fuerza. Si desde el cielo empiezan a caer un par de gotas hay que interpretarlo com el aviso de un pequenyo diluvio universal de al menos 40 minutos. Por el contrario cuando luce el sol el termometro que me acompanya supera con gran facilidad los treinta grados que junto a una ligera brisa hacen hicieron un secado rapido a mi segunda colada en suelo indiano.

Manyana partire en direccion a Gangotri donde nace el Ganga (Ganges) Segun leo en la guia seran unas interminables 12h de autobus. La intención será parar un dia en Uttarkashi. Acabo de mirar que para 155km tardare 7h… y me da una media de algo mas de… 20 km/h?

A Olga la volvere a ver en el valle de Katmandu ya en Nepal, a bien seguro volveremos a pasar unos dias mas que estupendos.



Sinopsis: Si alguna vez viajas por la India y necesitas un respiro… Rishinkesh tiene la atmosfera perfecta.

p.d. El titulo del post es una pequenya larga historia.

Bordeando el Ganges

Vamos en un autobus de pocas plazas bordeando el Ganges hacia Rishikesh. Resulta muy complicado escribir. Ya no recordaba el pesimo estado de las carreteras por esta parte del globlo, y mas, si tenemos en cuenta que es el final de la temporada de lluvias. Nos dicen los indios que el monzon se adelanto este anyo dos meses a la fecha prevista… aunque hasta el momento mis ojos solo han visto lloviznar durante diez minutos.

El rio es inmenso y... rebosa. Ayer tardamos veinte minutos a pie para recorrer, de punta a punta, uno de los puentes que lo cruzan.











A la llegada a Haridwar todos sus habitantes se encontraban en las calles. Los indi@s se dedicaban esa tarde-noche a ir de templo en templo. Ese dia se permite todo dentro de ellos (incluso hay musica a todo volumen sin ninguna queja por parte de los vecinos, of course) y a cualquier persona que se acerque le ofrecen su plato (hoja de planta) con pepino, platano, una especie de pasta de higo riquisima y otra clase de frutas dificiles de definir.





En Haridwar apenas hay turistas por ser un lugar de paso hacia el norte, aunque los templos del Mansa Devi y el Chandi Devi situados en la cima de las colinas, a lado y lado, del Ganges... bien merecen una visita.





A ellos se puede subir en teleferico (si, si… en teleferico!) pero decidimos subir por sus empinadas cuestas y, asi, asegurarnos que la diosa no tendra excusas para no hacer cumplir nuestros deseos.





Oh, Oh! Estamos a la entrada de Rishikesh, el conductor dice a todos los pasajeros que hay que bajar del autobus y seguir caminando (o como podamos) Una manifestacion de estudiantes parece que ha cortado el trafico. Como dice Olga: That`s India!

Encuentro, preludio y algo de orden en el caos

Un par de carrozas a la entrada de un pequenyo templo y ver como colocaban banderas con los colores nacionales en algunas de las calles… fue la senyal de un dia diferente en la India.

Pasado el mediodia pude encontrarme con Olga y Matt. Tras el “chai” (te con leche) de rigor me contaron los detalles de su primera experiencia como guias de un grupo de turistas. Me decia Matt que su grupo no le dio muchas dificultades, sin embargo, a Olga le toco uno cuyos miembros se quejaban por todo. Se quejaban por la comida picante, por el hotel, por las carreteras, por los indian@s. Parece que no le acompanyo la suerte... pues se encontro con un corte de carretera provocado por una huelga general como consequencia de la cesion, por parte del gobierno indio, de un templo hindu a los musulmanes de Cachemira. En otra ocasion, a la llegada a un templo se encontraba cerrado por el eclipse de luna de aquella noche... e incluso se le averio el autobus en dos ocasiones. Ambos se encuentran agotados... y no es para menos.

Mientras arreglaban sus tramites burocraticos con la agencia de viajes aproveche para dar una vuelta por el caotico mercado callejero de Paharganj... aunque, en realidad, si te fijas detenidamente te das cuenta que dentro del caos existe un riguroso orden.









Algo mas tarde me he acercado hasta el lugar donde incineraron a Gandhi, un MARAVILLOSO retiro de la jungla urbana, alejado de las multitudes y del temido trafico de Delhi.









A la vuelta me encontre de sopeton con la carroza que vi por la manyana acompanyada por otras muchas. Anunciaban el preludio del festival de Krishna (ni lo sabia) y hoy, según nos dijeron, es el dia grande del festival.



Hoy sera mi ultimo dia en Delhi, parto con Olga hacia Haridwar. Esta ciudad es la primera grande que se encuentra el Ganges en su recorrido hacia el mar... ya tengo ganas de llegar. Matt quiza se une mas tarde, por el momento prefiere un retiro en Dharamsala, lugar de residencia del Dalai Lama y sede del gobierno tibetano en el exilio. El viaja en moto (que valor!) tardara un par de dias en llegar hasta alli, pues me dice que un buen promedio es hacer 50km cada hora… aunque habitualmente se hacen entre 35 y 40.

El templo del loto

Al partir el avion hace algo menos de 2 anyos, desde el cielo de Delhi, vi el majestuoso templo del loto. Pocas horas antes habiamos llegado en tren a la capital desde Jaisalmer en el Rajasthan. Saliamos a las 4 de la tarde con un calor sofocante y el tren finalizo su trayecto en Delhi pasadas las 12 de la manyana. Tanto nosotros como el vagon llegamos a la capital con una buena capa de arena del desierto.

Unas cuantas horas nos quedaban para coger el avion de vuelta a casa y unas pocas rupias nos quedaban ya en los bolsillos, insuficientes para coger algun medio de transporte hasta el templo del loto. Nuestra valentia desmesurada nos llevo a aventurarnos en cruzar Delhi a pie. Pasadas un par de horas… nos dimos por vencidos. Avanzar un par de cm en el mapa se convertian, con el bochorno sofocante, en una autentica odisea y consumir, si o si, de 2 a 3 litros de agua. El punto final, o de vuelta, en aquella ocasion fue la puerta de la India.

Aquel dia al despegar el avion y ver el templo del loto desde la ventanilla me decia `mas temprano que tarde regresare`. Hoy he podido comprobar como el templo de la oracion no es tan majestuoso desde tierra como desde el cielo. No es un templo hindu como creia sino que esta concebido como punto de encuentro, donde se dan la mano los adeptos de todas las religiones. Sus perspectivas y su silencioso interior, donde no se pueden tomar fotografias, bien merecen una visita (aunque se tarde un par de anyos en llegar)







Por el momento sigo alojado en Main Bazaar, la arteria principal de Paharganj. Os dejo en video que grabe con el movil.



(un video vale mas que diez mil palabras)

Hasta pronto.

From Delhi

Fumar, fumar, fumar… Quien dijo que fumar era malo? El primer cigarrillo en suelo indio llego acompanyado de un fumador frances a la busqueda de la ansiada llama. Tras unas palabras me comento que preferia dormir en el aeropuerto y llegar a la ciudad por la manyana en autobus, opcion que ya habia barajado en Bcn, para evitar que el taxista de turno te llevase a una agencia de viajes de algun amigo o conocido.

Hoy ha sido la primera vez que he dormido en un aeropuerto y he conocido el valioso premio que supone encontrar dos butacas sin reposabrazos. Ahora me encuentro en una guest house en el barrio de Paharganj. Sobre la mesa me acompanya un cuaderno de viaje, un libro de gramatica inglesa, las 1200 paginas de la guia india, cold water, mechero y tabaco hindu. El frances duerme, manyana parte hacia Varanasi. De nombre Sylvain, arquitecto de profesion y gran dibujante. Lo comprobe despues de ver el retrato que hizo del templo de la cupula dorada mientras estabamos sentados bajo el gran numero de arcos que rodean su estanque. El Gurdwara Bangla Sahib se encuentra fuera de las rutas turisticas tradicionales de Delhi, es un lugar sagrado y de devocion para los sik (hombre de turbante). En el se respira mucha mucha paz. Sin duda.







Hace bochorno pero es soportable. No hemos visto el sol en todo el dia. Y que dia! Para ser el primero no esta nada mal… pues fotografiar la vieja Delhi, cerrar los ojos y recordar lo que estos veian hace poco mas de 24h te da a entender que sobre este planeta existen infinidad de contrastes.