martes, 27 de enero de 2009

Un "si" como respuesta

Ayer me dieron la noticia: Tu mobil no tiene arreglo. Y no fue sorpresa pues era algo que ya presuponia, aunque siempre te queda la duda de si tu mobil puede ser uno de los pocos, o poquisimos, que sobrevivan a una inmersion acuatica.

De menor a mayor, la utilidad que le di al mobil durante este tiempo fue: Uno. Para hacer/recibir llamadas. Dos. Como camara fotografica. Tres. De alarma. Cuatro. De camara de video. Cinco. Como pasatiempos... llegando a la conclusion que cuatro de ellas eran perfectamente prescindibles. Ante la duda de la tercera, la de alarma, me hice con despertador simple de esfera azulada, fondo blanco y cuatro agujas. Dos de ellas negras con el borde fluorescente. La roja para marcar los segundos y la que queda, la amarilla, la de la alarma. Ante una pila de dudosa eficacia tome la decision de no conectarla a menos que fuera necesario.

Un autobus con salida para hoy a las seis treinta de la mañana hizo que ayer noche llegara su momento... poniendole la pila, en hora (las 23:50) y, segundos mas tarde, llevando la aguja amarilla alrededor de las cinco cuarenta y cinco.

Ahora me pregunto si el hecho de no levantar anoche el pulsador de la alarma es la consecuencia de no utilizar durante tiempo un despertador de los de toda la vida, tambien, si el perder esta manyana el autobus va a cambiar de algun modo u otro los encuentros y vivencias que esten aun por llegar. Para ambas ya tengo respuesta. Es un "si" como respuesta.

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